LAS MANERAS DEL CÓNDOR

El cañón del Colca, en Arequipa, Perú, es famoso por la presencia de cóndores. En 1995, durante una visita al cañón, Bernardino, nuestro guía, nos contó la siguiente historia.

Un amigo de Bernardino, guía experimentado, había interesado a unos turistas a divisar el cóndor de una manera grandiosa. Contratado para hacer el trabajo, procedió a matar un burro y colocar el cadáver en un lugar estratégico, donde él sabía que el condor lo notaría. Luego pidió al grupo que regresara dentro de cinco días, explicando que el cóndor no come carne fresca.

En la mañana del quinto día, un par de cóndores apareció en el horizonte y procedió a inspeccionar el sitio, sin descender. Al día siguiente, un enorme cóndor, aparentemente el jefe del grupo, descendió, debidamente acompañado de un cóndor más pequeño, obviamente su aprendiz. Ambos procedieron a banquetearse sólo con los ojos y el ano, y luego se retiraron del sitio. Algún tiempo después, un grupo de más de veinte cóndores descendió al sitio, y rápidamente se encargaron del resto del desafortunado burro. Los turistas estuvieron muy contentos, y el amigo de Bernardino demostró una vez más que él era un maestro en las maneras del condor.

El cañón del Colca, en Arequipa, Perú.

El cañón del Colca, en Arequipa, Perú.